El duque de Huéscar inaugura en El Barco de Ávila los actos del centenario del nacimiento del Duque de Alba

El duque de Huéscar y presidente de la Fundación Hispania Nostra, Carlos Fitz-James Stuart y Martínez de Irujo, hijo de la duquesa de Alba, inauguró los actos conmemorativos del V Centenario del Nacimiento del III Gran Duque de Alba, Fernando Álvarez de Toledo, que culminarán con un congreso dedicado a la figura de este personaje.

Fitz-James Stuart pronunció anoche una conferencia titulada "El rayo de la guerra: el Gran Duque de Alba, militar y humanista", en la que glosó la trayectoria de su antepasado acompañado por el presidente de la Diputación de Ávila y regidor de El Barco de Ávila, Agustín González, y de su homónima salmantina, María Isabel Jiménez, ya que ambas instituciones compartirán la organización del congreso.También acudieron los alcaldes de Piedrahíta, Federico Martín, y la alcaldesa de Alba de Tormes, Concepción Miguélez, localidades relacionadas directamente con la Casa de Alba, en torno a lo que fue el Señoría de Valdecorneja y con el río Tormes como eje.

La Diputación abulense ha organizado, a través de la Institución Gran Duque de Alba, un ciclo de conferencias en la provincia sobre el centenario del histórico personaje, que en octubre se dedicará un congreso.En la reunión, donde se darán cita decenas de expertos, se analizará la relación del tercer Duque de Alba con la monarquía, el pensamiento militar, el modo de vida en sus tierras, el coleccionismo pictórico o la nobleza europea, entre otros asuntos, como la época en que vivió, entre los que destaca la conformación político-militar del reino de España con los gobiernos de Carlos I y Felipe II.

Con motivo del aniversario del nacimiento, el 30 de octubre de 1507, del Gran Duque de Alba, Fernando Álvarez de Toledo, las localidades abulenses de Piedrahíta y El Barco de Ávila y la salmantina de Alba de Tormes serán escenario del congreso entre los días 22 y 26 de octubre.Piedrahíta acogerá la inauguración de la reunión científica, coincidiendo con la conservación allí de la partida de nacimiento de Fernando Álvarez de Toledo --transcrito en 1920 por el entonces secretario del Consistorio, Jesús Lunas Almeida--, trasladándose después las sesiones a El Barco de Ávila, para clausurarse en Alba de Tormes, donde se conserva su certificado de defunción.

Pinto estrena un nuevo escudo tras subsanar los errores heráldicos del anterior

Pinto cuenta ya con un nuevo escudo, después de que el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobase los cambios presentados por el Ayuntamiento el 29 de marzo de 2004 al constatar que era imposible registrarlo de forma oficial por contener errores heráldicos.
El nuevo escudo supone la supresión de las ramas y el lazo, el cambio de la corona y la variación del jaquelado, manteniendo como elementos fundamentales el globo terráqueo en oro y azul, con un punto rojo en el centro.
Las modificaciones se realizaron tras conocer la historia del escudo y las explicaciones de los errores, avaladas por los historiadores del municipio. Siguiendo las tendencias afrancesadas de los siglos XIX y XX, el blasón del escudo del municipio no tenía las características propias del escudo español.
Por ello, y siguiendo las indicaciones de Luis Manuel Sánchez Jordán, diplomado en Heráldica, Genealogía y Nobiliaria por el Colegio Marqués de la Ensenada de Madrid, se efectuaron cambios para presentar un diseño más acorde con los tiempos actuales y ajustado a la tradición heráldica española.
El nuevo escudo de armas contiene un blasón rectangular, cuadrilongo, redondeado en su parte inferior. El jaquelado pasa de gules y oro a oro y gules. Otro cambio es el que afecta a la corona del escudo (corona de infante o real abierta), impropia de una monarquía parlamentaria constitucional como la española. El cuarto cambio afecta a las ramas gramíneas curvadas y unidas con un lazo con las que se ornamentaba, debido a que estas ramas aluden a gestas militares.

Protocolo y saber estar en la empresa

El objetivo del tema de hoy es proporcionar pistas y habilidades , respecto a la educación en las relaciones diarias con superiores y compañeros de trabajo. Seguro que todos de una forma u otra hemos vivido alguna situación incómoda o bien haber estado cerca en un momento dado.Recuerdo que en una empresa donde estuve hace años, tuve la mala fortuna de estar en medio de una discusión muy seria entre dos compañeras, estaba como observador, fue muy desagradable y ello provoco una tensión en el departamento.

Nuestro superior inmediato no supo atajar y esclarecer el hecho acontecido, ambas partes no apostaban por una cercanía, por un diálogo, a todos nos afectaba ese clima…Cada día en la vida de la empresa es distinto: informes diferentes, empleados nuevos, despidos y traslados, nuevas políticas de gestión, cambios en la dirección, clientes agradables o difíciles, compañeros/as conflictivos… Pensemos que en cada situación se nos propone, nos toca estar en nuestro sitio, es decir hemos de asumir, comprender y responsabilizarnos de cuantos imprevistos pueden surgir.Deberemos hacer gala de nuestros buenos modales puesto que en nuestro lugar de trabajo no actuamos individualmente, sino que las con las demás personas forman la imagen de la empresa.Por norma general las personas trabajan más a gusto y con mayor disponibilidad cuando el entorno le es más favorable que hostil. Seguramente eso es lo que piensa la dirección (aunque lo digan pocas veces) y que en definitiva puede agradecerle con ascensos, remuneraciones, flexibilidad de horario, días libres. Aún cuando no sea sí, ello no justifica que actuemos con poca consideración y máxima descortesía hacia las demás personas.

Por regla general:

- Evitar las groserías, discusiones, y pérdidas de nervios cuando estemos trabajando, procurar canalizar esas energías con coger un poco de aire, tomarnos un respiro, mirar de frente el problema y tensión y dosificarlo.

- Las relaciones personales debemos evitar dejarlas al margen de la vida profesional, pues nuestros problemas son sólo nuestros.

- Cuando nos lleguen visitas, levantarnos, presentarnos y atenderlos en todo momento, aunque tengamos un cargo muy considerado.

- Respetar el horario y ser puntual.- “Cavar una fosa” de confidencias y secretos profesionales, enterrarlos y no dejar que salgan a la luz. La ética y el secreto profesional es una de las cualidades más apreciadas.

- Las murmuraciones y los rumores pueden volverse contra nosotros, evitar especular si no sabemos que está pasando.

- De una forma cordial y espontánea saludar a todas las personas que forman parte de la empresa: altos o medios cargos, personal de mantenimiento y limpieza.Cuando nos dirijamos a alguien, no olvidar utilizar el tratamiento de “Usted” ( como decíamos hace unas semanas aquí…), hasta que no nos digan lo contrario: no estamos marcando una diferencia, sino respetando a los demás. Anotar los nombre de las personas que podeos confundir u olvidar. En situaciones de conflicto, de posibles desavenencias, mejor hacerlo en puerta cerrada. Ante clientes difíciles , adoptar una postura de tranquilidad y escuchar siempre los distintos puntos de vista. Otras observaciones a tener en cuenta:

- Procurar escuchar en lugar de oír cuando tengamos mucho que decir .- Reconocer los errores o faltas que se haya cometido, es mejor admitirlo una vez que ir cayendo poco a poco.

- Ante clientes o visitas de otro país, aceptar sus posibles diferencias, su cultura, su educación.- Los regalos que haga la empresa a sus clientes y al personal de intentarán acompañar con una nota manuscrita.

- Ir correctamente vestidos y arreglados nos ayudará más en nuestra profesión que si nos despreocupamos respecto a esta cuestión; la ropa informal y deportiva dejarla para el fin de semana. No caigamos en el error de pensar que las relaciones empresariales nada tienen que ver con la buena educación en sociedad.Vamos a procurar comportarnos en la empresa como actuamos fuera de ella, procurando que la conducta sea excelente en ambos lugares.

No es solamente el personal de dirección de la empresa quien debe presentar su mejor imagen, puesto que todas las personas que trabajan son un equipo y forman parte del conjunto. La educación abarca todos los estamentos jerárquicos.La combinación de cortesía y buenos modales en el mundo empresarial tiene otros ingredientes: capacidad de trabajo, colaboración, tolerancia, respeto y capacidad de convivencia con las demás personas. Será positivo saber administrar su trabajo y valorar la dignidad y prestigio del la empresa donde estamos. Si no es así, invito a la reflexión y aun posible cambio si es lo mejor para seguir avanzando en nuestro quehacer. No olvidemos la creatividad allí donde estemos…

J. Carlos Pérez es técnico superior en Relaciones Públicas, diplomado en Graduado Social, Experto Universitario en Protocolo y Asesor de Imagen. Ha desarrollado su labor entre Canarias y Barcelona. Actualmente es profesor de protocolo en instituciones locales, coordina las primeras jornadas de Asesoría de Imagen en Canarias y trabaja en su primer libro ¿Qué no es protocolo?

Fuente:Teldeactualidad