Dicen que el refranero español es sabio y se cumple prácticamente en el cien por cien de los casos. La campaña electoral no iba a ser una excepción, sobre todo en el caso del dicho “una imagen vale más que mil palabras”, algo que saben muy bien los partidos políticos que concurren a las elecciones a juzgar por el gran esfuerzo que realizan durante la campaña electoral en materia de protocolo, imagen y comunicación no verbal.En campaña electoral está todo minuciosamente estudiado y nada de lo que ocurre es por casualidad.
El look de los candidatos, los lemas de campaña y la estética que emplean en sus actos públicos tienen un gran peso en la estrategia del partido para conseguir el mayor número de votos en las urnas.Nada queda al azar en materia de imagen durante los días previos a la cita electoral porque las distintas formaciones políticas son conscientes de que el mensaje y sus propuestas electorales no lo son todo, como ocurría en los años de la Transición, en los que se empapelaban las calles con pasquines y mensajes electorales. Los tiempos también han cambiado en este sentido.De hecho, los expertos en comunicación verbal y no verbal apuntan a que el programa electoral, que en teoría debería ser lo fundamental para que optemos por una opción u otra, al final es lo menos relevante en la intención de voto, sobre todo en el caso de los indecisos y de aquellos que no tienen una ideología muy marcada.
De esta opinión es el experto en comunicación no verbal melillense Ángel Gil, director del gabinete de comunicación Protocolo 21, quien apunta a que la imagen que transmiten los partidos políticos durante la campaña electoral, tanto en la apariencia de sus candidatos como en la puesta en escena de sus mitines, representa el 70 por ciento del peso del voto, mientras que el mensaje sólo abarca el 30 por ciento restante.“Las palabras pierden cada vez más peso específico en favor de la estética, sobre todo en los tiempos que corren, en los que la imagen es fundamental no sólo en unas elecciones, sino también en el ámbito social y en el laboral”, subraya Ángel Gil, quien recuerda que “lo primero que vemos de una persona es la imagen y de forma inconsciente, lo primero que hacemos es calificar si es seria o simpática y si nos gusta o no”.Por eso la apariencia de los candidatos y, sobre todo, su vestuario, están cuidados hasta el más mínimo detalle en la campaña electoral. El hecho de que un candidato lleve una corbata o no, por ejemplo, puede hacer que el electorado se pueda sentir más o menos cerca, lo que resulta de vital importancia a la hora de arañar votos.
Por eso nuestros políticos suelen optar en los mitines por llevar una camisa sin corbata y una americana abierta, dada la sensación de cercanía que transmite en la gente.Los gestosOtra cuestión que los candidatos tienen tan estudiada como el propio discurso son los gestos, importantísimos para transmitir correctamente el mensaje que nos quieren dar, muy especialmente en el caso de las personas que no tienen gran habilidad oratoria. Y es que, tal y como nos apunta Ángel Gil, los gestos encierran implícitamente mensajes que permiten subrayar la idea central que queremos comunicar.
Como ejemplo, nuestro experto en comunicación no verbal recuerda haber visto por televisión en los últimos días al candidato socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, hablando de terrorismo y acompañando sus palabras con las manos cerradas, lo que refleja “firmeza ante un tema determinado”.“La comunicación verbal muchas veces no llega como le interesa al político, por eso suele acompañarlo con gestos porque, de esa manera, le ayuda a que el mensaje llegue mejor al público”, continua diciendo el director de Protocolo 21, quien matiza no obstante que, como ocurre con todo, cometer excesos con los gestos puede ser perjudicial para el objetivo que se busca.Por eso, Gil considera que la fórmula mágica para “llegar más” a la gente es “ser natural, como uno es”, ya que las campañas electorales “no se tratan de hacer un teatro de lo que uno es”.
Aún así, destaca la importancia de corregir aspectos perniciosos para conseguir una buena comunicación, entre los que destacan las famosas muletillas o los tics nerviosos, que distraen la atención de quienes nos escuchan. Lo mismo puede ocurrir con el exceso de complementos en el vestuario o la elección de prendas demasiado llamativas.De eso saben mucho los gabinetes de comunicación, a los que se encomiendan los partidos políticos, conscientes de la importancia que tiene que la estética sea acorde en cada momento.
Melilla
Y si la imagen ya es primordial en la política de ámbito nacional, mucho más en las ciudades pequeñas como Melilla, donde los candidatos intentan ser lo más cercanos posible, sobre todo si se trata de unas elecciones municipales. Los partidos son conscientes de que es en estos municipios donde más se vota por la persona y no por unas siglas políticas, de ahí que la imagen se mime tanto en estos casos.Sin embargo, Ángel Gil advierte de que, al mismo tiempo que los candidatos cuidan la imagen y la estética, también debe ocurrir lo mismo en el caso de las expresiones. Las manifestaciones públicas en las que abundan las faltas de respeto al contrincante, la prepotencia, la crispación y los enfrentamientos provocan en los ciudadanos una sensación de rechazo contraria a lo que buscan los políticos, algo que, por desgracia, “se da mucho en Melilla”.
Los lemas de esta campaña
PARTIDO POPULAR
Con cabeza y corazón: Con este lema, el PP intenta transmitir que la razón te haga movilizarte con el voto, pero también los sentimientos.
Las ideas claras: La idea fundamental que se quiere dar es que esta formación tiene claro cuáles son los problemas que preocupan a todos.
Con cabeza y corazón: Con este lema, el PP intenta transmitir que la razón te haga movilizarte con el voto, pero también los sentimientos.
Las ideas claras: La idea fundamental que se quiere dar es que esta formación tiene claro cuáles son los problemas que preocupan a todos.
PARTIDO SOCIALISTA
Motivos para creer: Es un lema dirigido sobre todo al electorado indeciso. Por eso se acompaña por megafonía de la canción ‘Que el tiempo no te cambie’, para fidelizar a quien le votó en 2004.
Vota con todas tus fuerzas: dirigido claramente a quienes siempre le han votado.UNIÓN, PROGRESO Y DEMOCRACIA
Lo que nos une: En el cartel, acompañado del DNI de Rosa Díez, trata de subrayar que son más cosas las que unen a los españoles que las que nos separan.
Motivos para creer: Es un lema dirigido sobre todo al electorado indeciso. Por eso se acompaña por megafonía de la canción ‘Que el tiempo no te cambie’, para fidelizar a quien le votó en 2004.
Vota con todas tus fuerzas: dirigido claramente a quienes siempre le han votado.UNIÓN, PROGRESO Y DEMOCRACIA
Lo que nos une: En el cartel, acompañado del DNI de Rosa Díez, trata de subrayar que son más cosas las que unen a los españoles que las que nos separan.
Fuente:Melilla Hoy