El alcalde de Coca, Juan Carlos Álvarez Cabrero (PP), no parece haber quedado muy satisfecho con la visita del ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, el socialista Jesús Caldera, a la localidad, el pasado miércoles, 11 de octubre. Álvarez sostiene que el ministro vulneró en Coca el orden constitucional porque el protocolo establecido por el Ministerio lo excluyó de los actos más representativos que tuvieron lugar.
El regidor asegura haberse sentido «totalmente excluido, despreciado y humillado», y subraya que en esos desprecios colaboraron el subdelegado del Gobierno, Juan Luis Gordo, el jefe de prensa del ministro y el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Coca, José Luis Acebes.
Concretamente, Álvarez señala en un comunicado público que fue relegado en el acto de entrega de las medallas al Mérito en el Trabajo que Caldera protagonizó en la fábrica del grupo Copese, en el que fue el subdelegado del Gobierno quien acompañó al ministro durante la presentación del acto, «cuando, según el Real Decreto 2099/1983 de 4 de agosto sobre el Ordenamiento General de Precedencias en el Estado, debería haber sido el alcalde, que se encuentra veintidós puestos por encima del cargo del subdelegado».
El alcalde añade que lo «más grave» ocurrió después: «A partir del instante en que el señor Caldera se montó en su vehículo, el equipo de Gobierno municipal lo perdió de vista, y pese a la infructuosa búsqueda que éste llevó a cabo por todo el pueblo, no logró encontrarlo». El alcalde dice que se enteró después de que el ministro había realizado una visita guiada a la población que nadie antes le comunicó. «Por si esto fuera suficiente, no se autorizó que el alcalde presentase el acto que además tuvo lugar en un local municipal, y en el que el ministro habló de la Ley de Dependencia», reunión con las amas de casa cuya organización fue promovida por el propio Ministerio y no por invitación del colectivo, según Álvarez.
El regidor asegura haberse sentido «totalmente excluido, despreciado y humillado», y subraya que en esos desprecios colaboraron el subdelegado del Gobierno, Juan Luis Gordo, el jefe de prensa del ministro y el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Coca, José Luis Acebes.
Concretamente, Álvarez señala en un comunicado público que fue relegado en el acto de entrega de las medallas al Mérito en el Trabajo que Caldera protagonizó en la fábrica del grupo Copese, en el que fue el subdelegado del Gobierno quien acompañó al ministro durante la presentación del acto, «cuando, según el Real Decreto 2099/1983 de 4 de agosto sobre el Ordenamiento General de Precedencias en el Estado, debería haber sido el alcalde, que se encuentra veintidós puestos por encima del cargo del subdelegado».
El alcalde añade que lo «más grave» ocurrió después: «A partir del instante en que el señor Caldera se montó en su vehículo, el equipo de Gobierno municipal lo perdió de vista, y pese a la infructuosa búsqueda que éste llevó a cabo por todo el pueblo, no logró encontrarlo». El alcalde dice que se enteró después de que el ministro había realizado una visita guiada a la población que nadie antes le comunicó. «Por si esto fuera suficiente, no se autorizó que el alcalde presentase el acto que además tuvo lugar en un local municipal, y en el que el ministro habló de la Ley de Dependencia», reunión con las amas de casa cuya organización fue promovida por el propio Ministerio y no por invitación del colectivo, según Álvarez.
Fuente:El Norte de Castilla
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