La Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén ha nombrado a Antonio Viñayo comendador de la Orden del santo Sepulcro de Jerusalén. El abad emérito de San isidoro ingresó en la Orden en 1997 con el grado de caballero. Antes de eso, había recibido la medalla al mérito del Santo Sepulcro en reconocimiento al recibimiento que siempre se ha dispensado en la Basílica a las distintas perregrinaciones de la Orden, tanto de España como del extranjero. Los estatutos de la Orden prevén que los eclesiásticos recibirán un grado determinado según su rango, y Viñayo, al pasar a abad emérito, fue nombrado por la Santa sede pronotario apostólico supra numerum, lo que le hacía acreedor al grado de comendador, que acaba de recibir. Los grados de la Orden son : caballero, comendador, comendador-gran oficial y gran Cruz. En 1999 tuvo lugar la proclamación canónica de San Isidoro como patrón de la Lugatenencia para España Occidental de la Orden del santo Sepulcro, acto presidido por el entonces Obispo de León, Antonio Vilaplana, también miembro de la Orden. La Casa Real estuvo representada por el infante-duque de Calabria.