«Despilfarro». Así se refirió el portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Vicente Martínez Pujalte, a los gastos excesivos del Gobierno en la utilización de aviones militares, protocolo y regalos, denunciados ayer por LA RAZÓN. La información aparecida en este diario hizo saltar ayer la polémica acerca de si el Gobierno central se excede en sus gastos, especialmente en los viajes. Martínez Pujalte entiende que sí y reprocha al Ejecutivo una «doble moral» por realizar «filtraciones hasta de los chicles» que compró en su momento el departamento dirigido por Eduardo Zaplana y eludir las acusaciones actuales.
«Con el PSOE hay más viajes, más gastos en protocolo y más regalos», dijo. De hecho, cifra en el doble la relación de estas salidas en comparación con la última legislatura en que José María Aznar ejerció de presidente. La pregunta directa al Gobierno llegará el próximo miércoles en la sesión de control semanal en el Congreso de los Diputados, para que se aclaren las respuestas parciales «poco transparentes» que el PP recrimina a los socialistas. En concreto, el diputado popular Rafael Hernando cuestionará a la ministra de Cultura, Carmen Calvo, si «corresponde a su idea de que el dinero público no es de nadie el uso de un avión oficial para pasar unas vacaciones privadas».
Junto a esta pregunta parlamentaria, el PP exigirá al ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla que elabore un informe de los polémicos gastos. Martínez Pujalte aludió al Código del Buen Gobierno para Altos Cargos como protocolo a seguir para la aportación de los datos.
Según adelantó LA RAZÓN, en más de mil ocasiones miembros del Gobierno usaron aviones y helicópteros del Ejército en lugar de utilizar líneas regulares. El precio de la hora de vuelo en un Airbus oficial se sitúa en 6.000 euros y en 2.000 el coste del Falcon 900 para ese mismo tiempo. Por su parte, el Gobierno aseguró ayer que los gastos mencionados figuran dentro de las previsiones de los presupuestos que cada Ministerio tiene asignado para desplazamientos y cuentan con la supervisión de la Intervención General del Estado. «Hay unas partidas presupuestarias de ministerios en todos y cada uno de los departamentos para transportes y desplazamientos de los ministros y altos cargos y los vuelos que se han efectuado se han cargado a estas partidas presupuestarias aprobadas por las Cortes Generales», dijo ayer la vicepresidenta del Ejecutivo,Teresa Fernández de la Vega, al término del Consejo de Ministros.
Por tanto, los costes no se salen de las cuentas del Estado. Además, quiso dejar claro que estos desplazamientos no se han sufragado con créditos extraordinarios, sino con arreglo al presupuesto ordinario. La vicepresidenta señaló que no podía cuantificar estos gastos, pero que, en cualquier caso, se realizaron bajo la supervisión de la Intervención General del Estado y con arreglo a la Ley General Presupuestaria.
Fuente:La Razón