Con toda la pompa y el exotismo de las monarquías del Lejano Oriente, el sultán Mizan Zainal Abidin acaba de ser coronado como el décimo tercer rey de Malasia, pero ni sucede a su padre ni su antecesor ha muerto antes de dejarle el trono. En un caso insólito en todo el mundo, la Monarquía de Malasia no es hereditaria, sino rotatoria, por lo que la corona va pasando cada cinco años entre los sultanes de los nueve estados que componen esta nación del sureste asiático.
Por eso, antes de que Mizan Zainal Abidin fuera entronizado, el anterior soberano, Syed Sirajuddin Syed Putra Jamalullail, recogió sus bártulos del Palacio Real de Kuala Lumpur y regresó a sus 63 años a su estado de Perlis tras pasarse un lustro como monarca de Malasia.
En una vistosa ceremonia, su sucesor, que vestía de amarillo por ser el color real, fue saludado con 21 salvas de honor en el Parlamento, donde lo recibieron el primer ministro, Abdullah Ahmad Badawi, y los ministros de su Gobierno. A continuación, y a bordo de su Rolls Royce, Mizan Zainal Abidin se dirigió al Palacio Real, donde juró como nuevo «Yang di-Pertuan Agong», el nombre que recibe el rey en malayo.
Con 44 años, el sultán del estado de Terengganu, rico en yacimientos de petróleo y gas, es el segundo soberano más joven del país desde que este sistema rotatorio fuera introducido por los británicos al final de la época colonial, en los años 50.
Aunque el monarca es sólo una figura ceremonial en Malasia, un país regido por una democracia parlamentaria, goza de gran prestigio entre los malayos musulmanes, que conforman el 60 por ciento de los 26 millones de habitantes, por atesorar las más ancestrales tradiciones culturales y erigirse como cabeza del islam.
De hecho, la proclamación de Mizan, que corrió a cargo del primer ministro Abdullah, terminó con oraciones y bendiciones a la espera de que, a principios de año, sea oficialmente entronizado en otra gran ceremonia.
El nuevo rey de Malasia, un experimentado jinete que representaba a su país en los Juegos Asiáticos de Doha y tuvo que volver a Kuala Lumpur para la coronación, ha estudiado en Australia y en la Universidad Internacional Americana de Londres. Además, ha recibido formación militar en la Academia Británica de Sandhurst.
Nombrado sultán en 1998, Mizan Zainal Abidin está casado con la reina Nur Zahirah y tiene cuatro hijos, uno de los cuales, de ocho años, ha sido designado regente de Terengganu mientras su padre ocupa el trono durante los próximos cinco años.
Fuente:ABC