Solemnes y elegantemente vestidos de frac, con camisas adornadas con pajaritas blancas y luciendo cadenas plateadas, los ujieres del Parlamento Europeo no pasan inadvertidos.
Todos están de acuerdo: sin los ujieres el Parlamento Europeo no podría funcionar de modo eficaz. Cada día entregan miles de documentos y correspondencia en despachos, reuniones de los grupos políticos y en las comisiones parlamentarias. Sin embargo, este es sólo una parte de su cometido.
Son de las primeras personas en recibir a los nuevos eurodiputados cuando asumen su cargo. Familiarizarse con los rostros de los recién llegados reporta muchas ventajas para un ujier. A toda velocidad deben saber qué eurodiputados están autorizados a ingresar en el hemiciclo o en una reunión a puerta cerrada. Solo así pueden, entonces, escoltarlos hasta su escaño, o pasarles una nota de su asistente o un mensaje de su grupo político.
Los ujieres presentes en el pleno actúan como intermediarios entre los eurodiputados y sus colaboradores. Sin embargo, algunas veces su trabajo es más delicado: a petición del Presidente de la sesión, pueden transformarse en oficiales de policía del Parlamento cuando un eurodiputado insiste en interrumpir los debates.
Hay también ocasiones en que son llamados para trabajar en otros destinos, como cuando un grupo político se reúne en alguno de los Estados miembros.
Dependiendo de sus funciones, existen dos clases de ujier: ujier de planta y ujier de sesión. Estos últimos destacan por su atuendo ceremonial. Sus fracs están hechos a medida y los ujieres están autorizados a guardarlos como recuerdo al finalizar su servicio. La única nota diferencial es para el Ujier Principal, que viste cadena dorada, mientras las cadenas de los demás ujieres son plateadas.
Todos los ujieres están al servicio del Presidente del Parlamento Europeo, pero uno de ellos es asignado personalmente al Presidente durante su mandato de dos años y medio. Al igual e incluso más que los demás ujieres, el ujier del Presidente debe demostrar absoluta discreción y estar siempre a disposición; sin importar tiempo o lugar.
Cuando se estableció el Parlamento Europeo, su primer jefe de protocolo fue francés; por ello, muchas de las funciones y tradiciones de los ujieres son de origen francés. El término francés para "ujier" es huissier (que deriva de huis: "puerta") y tanto el término como las funciones específicas del cargo tienen sus raíces en la historia de Francia. El puesto fue creado en 1789 (año de la Revolución Francesa) para mantener el orden durante los acalorados debates en la recién establecida Asamblea Nacional. Los fracs y cadenas usados por los ujieres del Parlamento Europeo también se remontan a las tradiciones establecidas en Francia. Hasta las primeras elecciones directas del Parlamento Europeo, los ujieres (al igual que los eurodiputados) eran elegidos en los parlamentos nacionales, pero desde 1979 los ujieres son contratados del mismo modo que otros funcionarios europeos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario