Desde primeras horas de la mañana cientos de ciudadanos se congregaban en los alrededores del Palacio Real, en la Plaza de Oriente de Madrid. Un gran número de niños, acompañados por sus padres y abuelos, esperaban ilusionados para acceder a la Plaza de la Armería de Palacio, donde ayer se celebró un relevo solemne extraordinario de la Guardia Real, seguido por un homenaje a los soldados de todos los tiempos caídos por España.
Los actos, cargados de interés y emoción, estuvieron presididos por la Infanta Pilar de Borbón, quien siguió la parada militar desde el balcón principal del Palacio. El cambio de guardia se realizó del mismo modo que cuando los Reyes de España tenían su residencia oficial en el Palacio de Oriente.
Los miembros de las Fuerzas Armadas hicieron las delicias de los más pequeños, entre los que había varios bebés, que quedaron encantados con los caballos, e impresionados con el paso de los aviones de la Patrulla Acrobática Águila del Ejército del Aire, que cerraron el desfile dejando los colores de la bandera de España en el ayer profundo cielo madrileño.
En el relevo especial de la Guardia Real -que lució para la ocasión los uniformes de gala y los ropajes históricos del Cuerpo- participaron una escuadra de Gastadores, la unidad de Música y Banda, dos unidades de Fusileros, dos secciones de caballería y dos piezas de Artillería ligera, que, con gran pericia, realizaron unas evoluciones en el Patio de la Armería.
Este acto especial, que tendría que haberse celebrado en octubre y que se retrasó debido a las malas condiciones climatológicas, resultó embellecido por la ofrenda floral a la Virgen de la Almudena, que todavía se podía contemplar.
Al relevo de la Guardia Real se sumó la recreación del acto de la entrega de credenciales de los embajadores destinados en España, en el que participaron cuatro bellas carrozas de Patrimonio Nacional. Un ceremonial que se lleva realizando sin apenas cambios desde tiempos de Felipe V.
Homenaje a los caídos
Presidido por Doña Pilar, también se rindió un sentido y solemne homenaje a todos los soldados que dieron su vida por España. La conmemoración la llevaron a cabo las unidades de honor de la Guardia Real, del Ejército de Tierra, la Armada, el Ejército del Aire y de la Guardia Civil.
Al son de la marcha militar «La muerte no es el final», se depositó una corona en memoria de los soldados fallecidos por la Patria a lo largo de la Historia.
Una vez finalizados los actos oficiales, la Banda de música de la Guardia Real ofreció un concierto frente a la Puerta del Príncipe, en la Plaza de Oriente. Los músicos interpretaron el pasodoble «Nostalgia de ti», la «Obertura» de la ópera El Barbero de Sevilla de Rossini, una antología lírica, una selección de las obras de Glen Miller y, como colofón, la marcha militar «Soldados para la Paz».
Video
Fuente:ABC-Antena3-Terra
Fuente:ABC-Antena3-Terra
No hay comentarios:
Publicar un comentario